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Amor propio


De nuestra flaqueza arranca nuestra fortaleza. R. W. Emerson.

Los sabios permanecen inquebrantables ante la censura o el elogio. Buda.

Quien nunca haya pronunciado la frase “realmente me acepto y me quiero tal como soy”, no debería ocuparse de asuntos que tengan que ver con el altruismo. A. Schwarz y R. Schweppe.

No podemos ser otra cosa más que egoístas... El egoísmo es un impulso originario, un instinto de conservación que nos permite pensar de manera razonable en nuestro propio bien. A. Schwarz y R. Schweppe.

¿Por qué ha de ser mejor ser útil a los demás que ser útil a uno mismo? Nietzsche.

Una sana porción de egoísmo puede acabar siendo una tabla de salvación que nos aparta de realizar algunas cosas que hubieran terminado perjudicándonos. A. Schwarz y R. Schweppe.

La mayor de todas las riquezas consiste en estar satisfecho de uno mismo. Epicuro.

En todo y en cualquier lugar bástanme mis ojos para mantenerme en el deber; no hay otros que me vigilen tan de cerca ni a los que respete yo más. Montaigne.

Haz valer tus derechos. Tienes derecho a ser respetado, a tener tus propias ideas, a tomar tus propias decisiones, a ser escuchado y a ser tomado en serio. Insiste en tales derechos... Sé tan benévolo y comprensivo contigo mismo como te gustaría serlo con los demás. J. Powell.

“¿Me preguntas en qué he aprovechado? He comenzado a ser mi propio amigo”. Mucho ha aprovechado: nunca estará solo. Ten presente que un tal amigo es posible a todos. Séneca.

El más feliz será aquel que, del modo que sea, consiga admirarse a sí mismo con sinceridad. Schopenhauer.

Compartes un vínculo con todos. Y ese vínculo es suficiente para crear una conciencia de valor y dignidad y puede convertirse en un consuelo en el caso de que pierdas todo lo demás. Dalai Lama.

Recordar las grandes cualidades que compartimos con todos los seres humanos neutraliza el impulso de pensar que somos malos o indignos. Dalai Lama.

Vivo de la confianza que tengo en mí mismo. Nietzsche.

¡No califiques ningún sentimiento de pequeño, de indigno! Hesse.

Si no corres el riesgo de amarte debidamente, te verás obligado a destruirte. Alan Watts.

Dostoyevsky decía que el texto bíblico “ama a tu prójimo como a ti mismo” seguramente ha de entenderse al revés, es decir, que sólo se puede amar al prójimo cuando uno se ama a sí mismo. P. Watzlawick.

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