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Mostrando entradas de marzo, 2024

No está en nuestras manos

Tenía razón Buda al señalar el apego como origen último de todo sufrimiento mental. Traducimos los deseos en expectativas y anhelos, y entonces nos aferramos a ellos, empeñamos en su realización nuestro bienestar. Tal vez en el fondo sepamos que no es cierto, tal vez solo se trate de una ilusión, pero así se asienta nuestra convicción.  Y de esa manera nos abocamos al padecimiento. Sufrimos de antemano (porque esperamos con temor de no obtener, porque insistimos obsesivamente, porque centramos todo nuestro esfuerzo en persecuciones a menudo quiméricas); sufrimos mientras poseemos, en lugar de disfrutar (porque nos angustia el temor a la pérdida, porque nos decepciona que las cosas no sean como esperábamos) y sufrimos cuando las cosas se acaban (porque no nos basta haberlas disfrutado, nos obcecamos en su duración; o bien porque nos dejan exhaustos, después de la tristeza y la lucha). Y, en los tres casos, nos sentimos responsables del triunfo o el fracaso: responsables de conseguir (

Esquiva belleza

La belleza es el amanecer de la alegría, el anuncio y la huella del gozo. Se le ha consagrado como diosa con razón, pues tiene una esencia de misterio que escapa a nuestra voluntad y que, además, inspira reverencia. Ante la belleza quedamos atrapados y rendidos, instados, como dice Schopenhauer, a «comportarnos igual que con un rey: colocarnos delante y aguardar a que nos diga algo».  La belleza se impone envolviéndonos con su poder de atracción. Valedora del placer, emplaza a nuestras motivaciones, inspira un movimiento de aproximación y de apropiación. Lo bello nos inspira alegría, frescura, armonía con el mundo. Lo bello consuela e ilumina, es un deleite que evoca otros deleites, una dulzura que anuncia, que se apresta. Queremos que lo bello sea nuestro, porque nos gustaría seguir maravillándonos en su presencia indefinidamente.  Es también una llamada, una convocatoria a la vida. Es ese encanto necesario del que hablaba Oscar Wilde. La belleza nos embarga, y en este sentido es un

Atisbo de la eternidad

«Y la nostalgia del instante de eternidad nos acompaña siempre», glosa con sugestiva imagen el sociólogo Francesco Alberoni acerca del enamoramiento. Habría que precisar: el enamoramiento de los desheredados, el que nos encandila pero no nos elige. El enamoramiento que nos consagra perdedores, y de ahí la nostalgia. «Haz que vuelva su rostro quien no quiso mirarme», canta Serrat.  ¿Y dónde está la puerta por la cual ingresamos en la eternidad? El novelista Milan Kundera nos lo expresó en una de sus frases más memorables: «El amor puede surgir con la primera metáfora». El destello de eternidad acontece cuando la realidad —tan plana, tan prosaica, tan literal— se inviste de simbolismo y se pone al servicio de lo poético. Es entonces cuando viene a imponerse el sueño, trastocándolo todo, cambiando de lugar las cosas y los significados. Había un anhelo contenido y se abrió la espita.  El enamoramiento es una marea que rebosa, una flecha que se proyecta hacia el futuro. Se hacen y rehacen

Una pareja

Conozco a una pareja que se martiriza y se quiere. Supongo que no es un contraste singular; pero resulta que esta pareja me queda cerca y me importa personalmente. La conozco bien. Por eso nunca agoto con ella el desconcierto.  Sucede además que me importan, y solo con eso queda justificado mi interés por su historia. Río y sufro con ellos, y el espectáculo de su vida forma parte del argumento de la mía, así que los observo con pasión y no dejo de hacerme preguntas. Cuestiones para las que hace tiempo que no espero respuesta, que han entretejido de enigmas la textura de mi proximidad.  Llevan toda la vida conviviendo, ya el último acto queda cerca. Eso pone un punto de dramatismo en su contemplación. Mirar por una tronera su paisaje, hasta donde alcance la vista, es una ofrenda de cariño y un modo de interpelar a la propia vida, que siempre escapa. Temo que apenas disfrutaron juntos, y sin embargo jamás se separaron: quizá no fueran del todo infelices, y tuvieran razones para mantene